Este 8 de marzo, se conmemora el 110 aniversario del Día de la Mujer. Todos tenemos a nuestro lado, alguna mujer, de la cual sentirnos orgullosos. Muchas de ellas, realmente, fantásticas, que a pesar de vivir en un mundo desigual, demuestran que no solo pueden asumir la total responsabilidad de sus hogares, sino que, además, pueden ser las mejores trabajadoras, emprendedoras y llevar altos cargos, sin dejar a un lado, su papel como; madres, abuelas, esposas, tías, hermanas e hijas.
Aún hay mucho camino que transitar para tener un mundo más justo y equitativo para las mujeres. Solo en el aspecto laboral, un estudio establece que, siendo optimistas, solo hasta el año 2060 los salarios serán equitativos teniendo en cuenta que hoy, en promedio, son un 20% menores para los mismos cargos y responsabilidades, excluyendo, el hecho de qué, lograr una promoción o ascenso al tratarse de una mujer, es 3 veces más difícil que para un hombre, tomando en cuenta solo a aquellas que sí han podido acceder a la educación superior, recibir sus títulos y, de una u otra manera, están activas en el mercado.
Según la UNESCO, hay 130 millones de niñas que ni siquiera van al colegio y otros 750 millones de mujeres, que asumieron casarse o ser madres antes de los 18 años, dificultando, en cierta forma, su acceso a la educación superior. En 117 países aun no existen leyes que prohíban, de cierta manera, proteger a las niñas, así como en otros 20, donde la violencia doméstica ni siquiera se considera como un delito. Sin embargo, también, hay soluciones. Si logramos que una joven termine la secundaria, tendría un salario 20% superior y un tercio de posibilidades de que se case antes de los 18. Podemos tratar, desde donde nos sea posible, unir esfuerzos y establecer puntos de vista con colegas, familiares y amigos, con el fin de proyectar y empezar con cambios desde nuestra propia casa.
Algo que puede llenarnos de esperanza y comprender, aún más, el papel de la mujer en la sociedad actual y para el futuro, es saber que, en estos tiempos de pandemia, el 70% de los trabajadores del sector salud, que están en la primera línea de atención, son mujeres. Un gran ejemplo de compasión, coraje, valor, empatía, dedicación y responsabilidad.
Aprovechemos este día para rendir homenaje a esas mujeres dedicadas, que tanto queremos, con alguna sorpresa o detalle especial, muy femenino, como una pequeña muestra de gratitud.
